La pandemia Covid-19 demostró a la humanidad lo vulnerable y, al mismo tiempo, fuerte y resiliente que era. Un suceso que con perspectiva que da el tiempo, también dejó enseñanzas positivas. Y no solo en el terreno sanitario. Para las empresas, por ejemplo, supuso un antes y un después en su manera de plantearse la relación con su entorno, los diferentes grupos de interés y la sostenibilidad. Una sostenibilidad entendida en un sentido más amplio, comprometido y transversal que se impregna en la cultura para llegar a todos y cada uno de los ámbitos corporativos.
¿Por qué la sostenibilidad es clave para las empresas en 2025?
Los primeros pasos de Donald Trump al frente de la Casa Blanca han confirmado los temores que ya sobrevolaban el universo de la sostenibilidad durante los meses previos a las elecciones norteamericanas: la intención nada velada del nuevo presidente de la primera potencia económica mundial de pisar el freno en los esfuerzos sostenibles de Estados Unidos. Un cambio de rumbo que se está viendo plasmado en numerosos gestos, como la salida del país del acuerdo de París, las medidas anti ESG o el apoyo a la extracción de petróleo (1).
En ese contexto de dudas en el panorama sostenible mundial es crucial que las empresas se mantengan firmes en sus compromisos para que la ya de por sí ajustada agenda de lucha contra el cambio climático y por la conquista de los Objetivos de Desarrollo Sostenible no se vea aún más comprometida de lo que ya lo está.
Principales tendencias en sostenibilidad empresarial en 2025
El Pacto Mundial ha publicado un listado de las que a su juicio serán las principales tendencias en sostenibilidad empresarial en 2025 (2). Según este organismo, estas son:
- Combatir el greenwashing mediante transparencia empresarial. La lucha contra el lavado verde se verá incrementada en 2025 gracias a nuevas normas como la Directiva de Alegaciones Ecológicas (Green Claims) (3) o el Proyecto de Ley de Información sobre Sostenibilidad (LIES) (4). Dos normas que inciden en la transparencia empresarial al exigir a las compañías que respalden sus afirmaciones sostenibles con datos demostrables.
- Gestión responsable de la cadena de suministro. La evolución hacia cadenas de suministro sostenibles y responsables es, desde hace unos pocos años, una clara tendencia de la sostenibilidad empresarial. Una corriente que seguirá creciendo en el nuevo año gracias a nuevas medidas como la Directiva de Diligencia Debida en Sostenibilidad Corporativa (CSDDD) (5). Esta exige a las organizaciones evaluar y mitigar los riesgos ambientales y de derechos humanos no sólo en lo referente a sus acciones directas, sino también en su cadena de suministro
- Aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) en el desarrollo sostenible. Las tecnologías exponenciales entran de lleno como un importante aliado en la lucha climática y se postulan como el máximo exponente de ese binomio formado por digitalización y sostenibilidad y el papel de la tecnología verde en ese proceso. El Pacto Mundial calcula que un buen uso de la IA podría, por sí solo, ser determinante para alcanzar el 24% de los ODS. Y también el Foro Económico Mundial asegura que la IA puede ser un factor decisivo en el camino de la sostenibilidad gracias a su capacidad para generar soluciones innovadoras frente a desafíos ambientales complejos (6).
- Revolución verde del mercado laboral. La transición hacia una economía sostenible está cambiando el mercado laboral. Así lo confirma el estudio Global Green Skills Report 2024 realizado por LinkedIn, en el que se revela que los empleos relacionados con la sostenibilidad han crecido de manera constante un 8% desde el año 2020 (7).
- Auge de la inversión y finanzas sostenibles. Pese a los movimientos de Trump para poner límites a los criterios ESG, las inversiones responsables siguen creciendo, especialmente España, donde según Spainsif (8), la inversión sostenible representó el 49% del patrimonio gestionado en 2023, una tendencia que se espera continúe avanzando durante 2025.
- Incertidumbre normativa: el impacto Omnibus. Tras unos años de ‘tsunami’ normativo vinculado a la sostenibilidad en el seno de la UE, parece que la tendencia de 2025 seguirá el camino de la simplificación como vía para que la necesaria evolución sostenible de las empresas no penalice su competitividad. Así parece confirmarlo el recientemente aprobado paquete Omnibus (9), destinado a reducir la carga administrativa de normas como la Taxonomía de la UE, la CSRD y la CSDDD.
- La escala de la ESG a la alta dirección. Otra de las tendencias que avanza en relación a la sostenibilidad es su impacto en los núcleos directivos de las compañías. Según el estudio Sostenibilidad en las empresas del IBEX-35: análisis del 2023, elaborado por Pacto Mundial (10), en España el 86% de los ejecutivos del IBEX 35 ya tienen su remuneración vinculada al desempeño en sostenibilidad.
Economía circular como modelo de negocio sostenible.
La economía circular continuará consolidándose durante 2025 como el gran modelo económico del presente y del futuro, con el reciclaje, la reducción de residuos o la reutilización como vectores que marcan el rumbo económico de cada vez más empresas y sectores de actividad. En ese sentido, la UE se ha propuesto convertirse en claro referente mundial de Economía Circular, para lo cual en 2020 se marcó un itinerario plasmado en su Plan de Acción para la Economía Circular (11). Esta ambición se verá reforzada y actualizada durante 2025 con la celebración en junio de la Semana Verde de la UE 2025 (12), cuyo tema principal será «Soluciones circulares para una Europa competitiva».
Transición hacia energías renovables en procesos empresariales
La reducción de la huella de carbono en las operaciones corporativas es uno de los grandes objetivos de la comunidad empresarial para 2025. En España, un aspecto a resaltar es la entrada en vigor desde 2025 de la obligatoriedad de realizar el cálculo y registro de la huella de carbono para medianas y grandes empresas, establecido por la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de Cambio Climático y Transición Energética (13).
Transición hacia energías renovables
Sin duda, en ese objetivo, jugará un papel troncal la transición hacia energías renovables. Más del 75% de la electricidad generada en España durante 2025 podría provenir de fuentes renovables, como la solar y la eólica, lo que consolidará a nuestro país como un líder en sostenibilidad dentro de Europa.
En definitiva, la combinación Agenda 2030 / Covid-19 parece haber reseteado a mejor el tejido empresarial. Una reprogramación proactiva y en clave sostenible que tiene en la innovación y las tecnologías un aliado con el que buscar permanentemente nuevas soluciones para sus negocios que sean circulares, apoyadas en el bien común y, al mismo tiempo, más eficientes y económicamente rentables.
Referencias
(1) https://ethic.es/2024/08/que-puede-suponer-vuelta-trump-medio-ambiente/
(8) https://www.spainsif.es/estudio-spainsif-2024/
(11) https://eur-lex.europa.eu/legal-content/EN/TXT/?qid=1583933814386&uri=COM:2020:98:FIN
(12) https://environment.ec.europa.eu/events/eu-green-week-2025-06-03_en
(13) https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2021-8447