¿Cómo saber que algo es lo que parece o alguien es quien dice ser? Con ese objetivo y para aportar seguridad a las actividades humanas nacieron las certificaciones. Hay certificación para casi todo, y también hay certificación de sostenibilidad.
Certificación de sostenibilidad, ¿Qué es y para qué sirve?
Una certificación de sostenibilidad es un estándar al que se someten voluntariamente las empresas para evaluar y constatar que sus actuaciones se ajustan a una serie de principios sostenibles. La certificación es emitida por una entidad independiente de prestigio, que es también la encargada de evaluar el cumplimiento de la empresa respecto a los criterios establecidos.
La importancia en el contexto empresarial y ambiental de las certificaciones de sostenibilidad es muy destacable en la medida en que aportan seguridad jurídica, tranquilidad y transparencia a los consumidores, además de contribuir de manera significativa a impulsar la protección social y del medio ambiente.
Tipos de certificaciones de sostenibilidad
Existen diversos tipos de certificaciones globales reconocidas, como el ISO 14001 –focalizado en la gestión ambiental–, EcoVadis – que abarca distintos sistemas de gestión no financieros, como impactos en el medio ambiente, prácticas laborales, derechos humanos, ética o compras sostenibles– o SEDEX – orientado a las cadenas de suministro–.
Además, hay certificaciones específicas por sectores, actividades o regiones, que responden a las características particulares de una determinada industria, aspecto ambiental o área geográfica. Ejemplos de certificaciones específicas son la ISO 50001 de Eficiencia Energética o VERDE, la herramienta de evaluación de la sostenibilidad para la edificación desarrollada por GBCe.
Proceso de obtención de certificaciones de sostenibilidad
Obtener una certificación de sostenibilidad implica someterse a un proceso de evaluación y cumplir unos requisitos y criterios para la certificación que vienen marcados por la entidad certificadora. Hay una serie de pasos y evaluaciones involucrados en el proceso que dependen de cada tipo de certificación, pero que, en general, suelen incluir auditorías ambientales, análisis del ciclo de vida de los productos (ACV), planes de gestión de residuos, estudio de eficiencia energética o revisión de procedimientos y políticas ambientales y sociales.
Beneficios de la certificación de sostenibilidad
Obtener una certificación de sostenibilidad, por un lado, mejora de la reputación empresarial, ya que una compañía certificada es una organización que está demostrando ante sus públicos un genuino compromiso con la sostenibilidad. Pero, además, una certificación ambiental es una interesante vía de ahorro de costes, propicia la mejora de las relaciones con los stakeholders, evitación de problemas legales, mejora de la competitividad y acceso a nuevos mercados y clientes.
Desafíos y consideraciones en la obtención de certificaciones
A pesar de estas ventajas, las certificaciones de sostenibilidad tienen también que hacer frente a desafíos que dificultan su expansión. Entre ellos, sus costos y recursos asociados, con frecuencia solo al alcance de las grandes empresas.
Además, las certificaciones deben abordar obstáculos como la inversión de tiempo y recursos humanos que supone para las empresas someterse a ellas, las dificultades técnicas y cambios operativos que implica cumplir sus requisitos o las novedades legislativas y tecnológicas, que obligan a frecuentes revisiones.
Estudios de casos exitosos en certificación de sostenibilidad
En un mundo cada vez más regulado en materia de sostenibilidad, empresas de todos los tamaños y sectores realizan certificaciones de sostenibilidad que acrediten sus comportamientos como responsables frente a reguladores y opinión pública. Compañías como Carrefour (certificado IPS a la producción sostenible), Inditex (sello LEED Oro de sostenibilidad en sus edificios) o Coca-Cola (sello PEFC de conservación de bosques) son unos pocos ejemplos de cómo las certificaciones forman parte integral de la estrategia sostenible de las impresas y tienen un impacto positivo en sus operaciones y percepción pública.
Integración de prácticas sostenibles para la certificación
La obtención de una certificación de sostenibilidad suele implicar realizar una serie de cambios dentro de la operativa diaria de la empresa. Algunos de esos cambios pueden ser relativamente sencillos, como reducir los consumos de agua o de energía, mientras que otros requerirán mayores esfuerzos e inversiones, como desarrollar una política de inclusión y diversidad dentro de la empresa, implementar un sistema circular de gestión de residuos o cambiar las fuentes de generación de energía a modelos renovables.
Pero más allá de medidas concretas para mejorar el desempeño ambiental y social de la empresa, una compañía que se somete a uno de estos procesos está adquiriendo compromisos a largo plazo con la sostenibilidad. Ahí radica su gran valor añadido.
Certificaciones de sostenibilidad en diferentes sectores industriales
Existen certificaciones de sostenibilidad en la mayoría de campos de actividad, aunque éstas son especialmente necesarias en determinadas industrias, como la alimentación, la construcción, la energía o el transporte.
Respecto a las primeras, hay numerosos ejemplos de certificaciones en la industria alimentaria, como la ISO 22000 de gestión de seguridad alimentaria o GLOBAL GAP, que certifica que los productos son elaborados en base a buenas prácticas agrícolas.
Otras certificaciones relevantes en sectores específicos son: el Sistema de Gestión Forestal Sostenible, el certificado Medway de transporte sostenible o la Certificación Residuo Cero para la gestión de residuos.
Evaluación y renovación de certificaciones de sostenibilidad
Una certificación de sostenibilidad no debe ser abordada desde un planteamiento estático. Se trata de un proceso de evaluación continua en permanente desarrollo. Estas certificaciones se gestionan, además, en un entorno de cambios normativos, evolución tecnológica y avances sociales que demandan continuamente nuevas medidas y políticas empresariales en materia de sostenibilidad. De ahí la importancia de la renovación periódica de las mismas.
Reconocimiento y validación internacional de certificaciones
Una de las claves del éxito de las certificaciones de sostenibilidad es que cuentan con el respaldo de entidades internacionales de reconocido prestigio, ya que es el elemento que les otorga credibilidad y aceptación a nivel mundial. En ese sentido, organizaciones punteras como AENOR, B Corporation o Fairtrade International son la mejor garantía para las empresas que llevan sus sellos.
Certificaciones de sostenibilidad y cumplimiento normativo
Existe una estrecha relación entre certificación de sostenibilidad y legislación, hasta el punto de que se puede entender cumplimiento legal y sostenibilidad como sinónimos en cierta medida. Las certificaciones facilitan a las empresas ajustarse a unas normas cada vez más numerosas y exigentes en materia de sostenibilidad, les evitan problemas legales en forma de posibles sanciones por incumplimientos y les mantienen alerta frente a la llegada de nuevos cambios.
Innovaciones y tendencias en certificación de sostenibilidad
Una certificación de sostenibilidad es un ente vivo y en permanente evolución, ya que continuamente surgen nuevos problemas ambientales o sociales y, en paralelo, nuevas formas de enfrentarse a ellos. Como resultado, aparecen nuevas certificaciones emergentes como la certificación de AENOR de Agricultura Regenerativa, conforme al modelo Epigen Healthy Bite.
Por otra parte, el uso de tecnologías para facilitar procesos de certificación está imprimiendo un nuevo impulso a estos procesos, simplificándolos y acelerándolos. Tecnologías como la IA aplicada al análisis y procesamiento de grandes cantidades de datos no solo facilitan a las empresas los trámites de certificación, sino que les permite ensayar y anticipar posibles problemáticas futuras.
Perspectivas futuras en certificación de sostenibilidad
Precisamente los constantes desarrollos tecnológicos abren nuevas e interesantes posibilidades en la evolución del panorama de las certificaciones de sostenibilidad. Un panorama que se presenta repleto de nuevos retos y oportunidades. Entre los primeros, la necesidad de homogeneizar estos sistemas de gestión sostenible para no inducir a confusión a los consumidores, o de simplificar y automatizar unos procesos que deben basarse en un modelo de evaluación constante. En cuanto a las segundas, cabe resaltar el papel que estas certificaciones pueden desempeñar como palanca para la promoción de prácticas responsables en las organizaciones.
Casos de controversia o fraude en certificaciones de sostenibilidad
También existen casos de empresas que han tratado de justificar comportamientos supuestamente sostenibles a partir de certificaciones o procesos para obtenerlas cuestionables desde el punto de vista de su rigor o transparencia.
Existen ejemplos de certificaciones cuestionables que responden más a prácticas de greenwashing que a un genuino compromiso sostenible. La entidad Fundación Changing Markets alertó en un informe de hace unos años sobre etiquetas voluntarias, como la Marine Stewardship Council para el pescado sostenible, que, a su juicio, no estaban suficientemente avaladas como prueba de sostenibilidad.
Lecciones aprendidas y mejoras necesarias
De estas deficiencias surgen interesantes aprendizajes. Por un lado, se acentúa el debate acerca de si las certificaciones sostenibles deben seguir siendo voluntarias o si, por el contrario, deberían ser obligatorias para las compañías. Por otro, la necesidad de establecer mecanismos de control de las propias certificaciones para dotarlas de mayor transparencia. En Europa las principales certificaciones ambientales cuentan con un doble factor de verificación en forma de aval otorgado por organismos de acreditación, función que en España desempeña la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC).
Rol de la certificación de sostenibilidad en la Responsabilidad Social Empresarial (RSE)
Integración de la certificación en estrategias de RSE
Las certificaciones de sostenibilidad juegan un papel muy destacado en las políticas de Responsabilidad Social Empresarial, ya que, en cierta forma, marcan la hoja de ruta sostenible que debe seguir la compañía en sus procesos y actuaciones. Por esa razón, es importante que estas certificaciones formen parte de las estrategias sostenibles corporativas. Por otra parte, estas acreditaciones tienen un notable impacto en la percepción de la empresa como actor social responsable.
Conclusión
Una certificación de sostenibilidad es mucho más que una simple ‘etiqueta’, es una poderosa palanca que puede impulsar una verdadera transformación del modelo empresarial hacia prácticas más sostenibles y en sintonía con la sensibilidad social y las necesidades del planeta.
Resumen de los beneficios y desafíos de la certificación de sostenibilidad
Beneficios:
● Aportan transparencia y seguridad a las actividades empresariales.
● Mejoran la reputación empresarial y las relaciones con los stakeholders.
● Permiten ahorrar costes e incrementar la competitividad.
● Consolidan el compromiso empresarial con la sostenibilidad a largo plazo.
● Sirven como guía para el seguimiento de prácticas empresariales sostenibles.
Desafíos:
● Unificación de criterios.
● Debate de la voluntariedad.
● Incorporación de la tecnología.
● Reducción de costes y simplificación de procesos.
Importancia continua en un mundo enfocado en la sostenibilidad
Por último, las certificaciones de sostenibilidad son un instrumento crucial para la lucha contra problemas globales y en continua evolución como la lucha contra las desigualdades sociales o la emergencia climática. Una guía que aplicar de manera trasversal en las compañías y que orienta, inspira, regula y acompaña a las empresas en su camino hacia la sostenibilidad.